domingo, noviembre 15, 2009

VOCES DE LA PIEDRA NEGRA
( la poesía de Johnny Barbieri)

por: Jorge Palma


La poesía de Johnny Barbieri se me antoja como una piedra negra (no oscura), ya que la oscuridad, parienta directa de las tinieblas, está más vinculada con la muerte que con el misterio esencial.
Su poesía llega a nosotros con la gravedad del anuncio de una verdad última, como si fuera necesario (y lo es) prestar mucha atención a lo que se está diciendo, porque es casi seguro que no volverá a repetirse ese milagro.
En medio de esta inmensa confusión total que es el mundo actual, lograr que un libro de poesía haga detener nuestra marcha enloquecida, no es poca cosa, y si a eso le sumamos que, además de detener la marcha, esa poesía exige nuestra total atención, es algo para celebrar.
La poesía de Johnny Barbieri tiene, entre otras cualidades, la de contar una historia o varias, con ribetes de misterio, como si a través de los versos del poeta limeño hablaran sus antepasados, con la sabiduría incuestionable de un oráculo; una poesía portadora en si misma de un mensaje que atraviesa todas las edades, no sólo de su patria, sino del continente entero; con versos que se encadenan de forma notable con el anterior, y se complementan con el siguiente, en una especie de cadena de montaje de la más pura iluminación. Poesía de curiosa sonoridad, falsamente oscura. Me animaría a decir que la poesía de Johnny Barbieri tiene la luz necesaria y medida, para ser tomada como algo tan importante como un mensaje, algo de verdad revelada; como la voz que a través de un chamán se instala en los dominios del aire, y nos ayuda a interpretar mejor los signos del día.

© 2009, Jorge Palma – labrador@jorgepalma.com.uy

Johnny Barbieri(Perú) y Jorge Palma (Uruguay) leyendo en la UNEAC - La Habana-Cuba

martes, julio 21, 2009

POESIA Y VERDAD EN LA OBRA DE JOHNNY BARBIERI
Por: Alfredo Nicolás Lorenzo

El poeta avanza, se nos aproxima, nos asedia desde el mismo núcleo del misterio, de lo incognoscible, de su secreto tesoro, de su interior cantera grávida de ensueños y magia trae esos regalos, ese magnífico despojos de su espíritu que son los versos. Pocas veces vivencias de las más nobles que es dable gozar al amante de la poesía logramos escuchar en la propia voz del poeta la teoría de su arte, el desfile de sus normas, y su particular experiencia y sentir acerca de esa expresión suya hecha de amor y de fervor, Porque sólo tenemos para nuestro placer de seres perecederos aquella letra, aquella música que brota de su ánimo, de su creación, aquel perfume que parece perderse en los ámbitos de su aérea arquitectura.

Al escuchar en una tarde luminosa de Mayo acá en la Habana, en el marco del Festival Internacional de Poesía a Johnny Barbieri, poeta peruano de acento brizado de asombro y temblor, y enamorado del mundo; además identificado con el fresco de su coloquio, la esencia y el candor de su poesía exquisita, la fragilidad de la palabra de este poeta que alcanza en ocasiones la rotundidad del acero fino, va desgranado sus meditaciones en torno al hecho poético. Sus imágenes logran ofrecer la más justa y ceñida visión de su glosa a la propia obra, dando claror exposición didáctica a su plática aleccionadora. Sin adoptar posturas de domine, no se rodea de bruma para ser esotérico su mensaje, su charla abre senderos claros para su poesía nimbada de claridades.

El poeta halla de este modo la satisfacción de una fraternidad superior, de una comunicación espiritual de muy alta especie. Para Johnny Barbieri la poesía es tránsito, traslación, como el árbol cuando hunde sus raíces en la tierra y se eleva, se yergue y levanta sus ramas como brazos hacia el cielo; ese afán de altura, ese anheló de la luz y de lo desprendido es la sustancia de la poesía de este peruano.

Si en la tierra encuentra sustentáculo y apoyatura, en el poeta no puede permanecer, ya que queda como pegajoso amor en el campo. Por eso la poesía causa cambio en el, es una mutación que deja a los seres humanos en su primera condición: la poesía imprime su huella en ellos y los trasmuta y da un impulso que los levanta sobre el suelo.

De este índice primero derivan tres pautas para la poesía, una ha de ser móvil, no es estática, dos ese afán de remontar el vuelo ha de poner ante sí un exacto punto de llegada y por último, cancela sus aristas, purifica su expresión, aquí lata sus elementos en un constante deseo de pureza. A todos nos llega la poesía y la verdadera poesía encuentra asiento en todo corazón humano, yo confieso que los momentos de mayor satisfacción de Johnny Barbieri como poeta, como profesor, como amigo han sido aquellos en los cuales el ha podido observar la forma en que sus poemas se aposentan en los oyentes y en los lectores. Un sentimiento ecuménico, una filiación de comunidad se establece de esta manera entre el creador de poesía y los lectores ávidos de vinculaciones.

Nos quedan todas estas consideraciones en el campo teórico, meramente iconoclasta y mesiánico, Johnny Barbieri nos entrega con ademán y recato de cabal creación, algunos de sus poemas; nadie puede discrepar de esas nociones sobre el arte poético que el autor va desenvolviendo en el curso de su charla, cierta desavenencia cabría existir en otros conceptos suyos acerca de su escritura; porque a fin de cuentas la poesía esta más allá, o más acá de la creación o la expresión suprarreal que mira hacia fuera con cierta ubicuidad poética.

Quedará para siempre en la Literatura Peruana libros como Branda y la Mesón de los Pandos (1993), El libro Azul (1996), MAKA (1999), Jugando a ser Dios (2000), Carne de mi carne (2002), La Virgen Negra (2003), Libro Hindú (2005) y Yo es otro (2007); escrituras que le han dado un reconocimiento nacional e internacional a Johnny Barbieri, a veces he llegado a pensar como es que le va llegando este talento creador a este hombre, a esta personalidad humana, que lo sitúa entre los escritores más contemporáneos del siglo XXI.

Casa de las Américas, La habana 2 de Julio de 2009.

Johnny Barbieri y Alfredo Nicolás


Alfredo Nicolás Lorenzo, Camaguey (1964). Poeta, practica la narrativa y el ensayo. Es fundador de la revista Proposiciones de la desaparecida Fundación Pablo Milanes, ha colaborado en Alforja Poesía y La Voz de Coahuila (México). Actualmente se desempeña como docente, promotor cultural y coordinador de talleres. Es miembro del Taller Literario de la Fundación Nicolás Guillén; aparece en la Antología Sonetos de Amor y otros poemas, (Universidad Autónoma de Coahuila, México (2003) y también en la Revista Hispanoamericana de Literatura del Perú. Ha participado con relativo éxito en concursos internos universitarios de poesía; ha publicado también numerosos ensayos, artículos y material periodístico en su corta carrera literaria.


domingo, abril 26, 2009


Poema de Johnny Barbieri traducido al catalán por Pere Bessó


POEMA DE JOHNNY BARBIERI TRADUÏT AL CATALÀ PER PERE BESSÓ

CIGNE EN PRIMAVERA

També en primavera moren els cignes
i hi flotava mort un diumenge
en aqueix estany esclofollat pel vent
El meu cigne girava com les agulles del rellotge
distingí les seues ales trencades
el seu pit foradat per una bala que travessà el seu cor
Un tros d’estany s’havia coagulat cobert per la sang
del meu cigne trencat
les dones cridaven espaventades en veure’l desfet davall del sol
els gossos lladrugaven esglaiats pressentint la fi
tot el lloc quedà consternat en veure el cigne en una mort eterna
En primavera morí el meu bell cigne
hui és damunt d’un estany
estés amb el cor a la mà
petrificat davant de les mirades de tot el món


CISNE EN PRIMAVERA*

También en primavera mueren los cisnes
y allí flotaba muerto un domingo
en ese lago descascarado por el viento
Mi cisne giraba como las manecillas del reloj
distinguí sus alas rotas
su pecho perforado por una bala que atravesó su corazón
Un trozo de lago se había coagulado cubierto por la sangre
de mi cisne roto
las mujeres gritaban aterradas al verlo deshecho bajo el sol
los perros ladraban asustados presintiendo el fin
todo el lugar quedó consternado al ver al cisne en una muerte eterna
En primavera murió mi hermoso cisne
hoy está sobre un lago
tendido con el corazón en la mano
petrificado ante las miradas de todo el mundo

Yo lo lloro.


*Cisne en primavera es un poema basado en un texto de Charles Bukowski.